Almas amorosas y divinas,

Que las más selectas bendiciones de Dios y de los maestros sean con vosotros. Aprovecho para rezar por vosotros y enviaros mis mejores deseos con motivo del Día de la Madre, que este año se celebra el 8 de mayo.

Una madre es simplemente la Madre, porque no hay nada como ella. ella es única La maternidad es la cualidad divina que las madres manifiestan en forma de amor, paciencia, tolerancia, cuidado, servicio y, sobre todo, perdón.

Una madre no es solo la persona que nos dio a luz; ella es también el aspecto universal de la maternidad en la forma de amor materno.

En la creación, Dios se manifiesta como Madre y Padre, la trinidad cristiana la veo como Dios Padre, el Espíritu Santo como Dios Madre y Dios Hijo como la procreación divina. Todo es divino.

Según los Vedas, todo es también divino. La naturaleza es divina. La creación es divina. La tierra, el agua, el fuego, el aire, el espacio, el medio ambiente, las plantas, las flores, las frutas, las semillas, los insectos, los animales y los seres humanos son todos divinos. Todos están relacionados con la madre y la maternidad.

Que podamos expresar amor, devoción y aprecio por nuestras madres y apreciar su contribución al traernos al mundo. Ella nos sostuvo en su vientre y compartió su vida con nosotros. Y después de nuestro nacimiento, nos alimentó con sus pechos, nos estrechó contra su pecho y compartió con nosotros su vida de amor y sentimiento, entre risas y lágrimas. Ella se convirtió en un refugio, un apoyo y nuestra fuerza, así como una higuera es el hogar de innumerables pájaros.

Ella soportó todos los problemas sin un suspiro ni tristeza, sembrando el espíritu de unidad y comprensión entre sus hijos, inspirándolos, animándolos y ofreciéndoles consuelo y tranquilidad en sus momentos de angustia y dificultades.

La virtud de una madre no tiene límites. Ninguna pluma es capaz de narrar su gloria y grandeza. Recordarla es un consuelo y amarla es nuestro gran homenaje.

Que en este día especial le brindemos nuestro amor, devoción y homenaje, y cultivemos el amor materno, esforzándonos por ser mejores personas.

Ofrezco mi amor a todas las madres de la creación y, en última instancia, a Dios y a los gurús que son madres. Les ofrezco mi amor y mis mejores deseos a todos ustedes.

Con amor,
Prajnanananda